Lágrimas redimidas de culpa que se sumergen en nuestro oído, mezcladas con un éxtasis de ondas que chocan entre sí. Lágrimas que nos cuentan su nacimiento y el por qué se descubren ante nosotros, llantos que se unen al nuestro, y que caen en el mar para que parezcan más insignificantes, y todo acaba cuando la canción muere.
No hay comentarios:
Publicar un comentario