sin necesidad de mediar palabra porque no existe un silencio incómodo,
sino un silencio que nos habla, que nos hace reflexionar
junto con la mirada de la luna y la brisa de las olas,
y observar el mundo que nadie puede ver
porque surge de la relación de la noche con nuestra presencia
y empezar un recuerdo del momento vivido,
junto con la mirada de la luna y la brisa de las olas,
y observar el mundo que nadie puede ver
porque surge de la relación de la noche con nuestra presencia
y empezar un recuerdo del momento vivido,
y vivirlo para siempre en nuestros corazones...
Es tan agradable sentir como la brisa va acariciándote y como las olas van meciendo la mente hasta que te quedas como en trance entre el mundo real y ese mundo al que es tan necesario ir.
ResponderEliminarTe has fijado en la luna que hay hoy ... lo ilumina todo no hace falta ni encender la luz :).
Me ha pasado, es cuando sientes que no hace falta ni hablar... Ya lo dijo Neruda
ResponderEliminarMe gusta cuando callas...
Qué bueno eres coño!